Abrazos de corazón
Les voy a contar algo muy, muy bonito que hice con mi familia. Regalamos abrazos a todas las personas que veíamos que pasaban por nuestra calle, que es en el ejido la Cantera, Nayarit.
Autor: David. 5 años. PREES. Tepic. NAYARIT.
Les voy a contar algo muy, muy bonito que hice con mi familia. Regalamos abrazos a todas las personas que veíamos que pasaban por nuestra calle, que es en el ejido la Cantera, Nayarit.
La idea fue mía y de mi mamá, porque queríamos que la gente no se sintiera sola. Bueno, los abrazos son súper importantes porque con ellos les decimos a los demás que los queremos mucho y que los cuidamos, y pues así no están tristes.
Abrazamos a muchos: como a señores que venían de trabajar, a abuelitos que cenaban solos, a señoras con sus niños haciendo berrinche y hasta a la que vende hot dogs.
Abrazando a mamá, licencia CC0/rawpixel.com
Corazones, licencia CC0/rawpixel.com
Cuando los abrazábamos, ¡se ponían muy felices y sonreían! También nos abrazaban a nosotros y les dábamos unas cartitas con dibujos que hicimos mis primos y yo. Cuando las abrían, se ponían más contentos y nos decían "gracias".
Mi mamá y mis dos tías que siempre me cuidan, ayudaron a hacer juntos un cartel grandote que decía: "¡Se regalan abrazos!". Mi abuelo Edi, mis primos Cristian, Kenia y Sofi también ayudaron con las cartitas y hasta a abrazar a todos.
Abrazos, licencia CC0/rawpixel.com
Al osito, licencia CC0/rawpixel.com
Abrazando, licencia CC0/rawpixel.com
Mientras preparábamos todo en la casa, estábamos muy emocionados. Yo solo pensaba en cuántos abrazos iba a dar. Vimos que las personas que recibieron los abrazos se sintieron felices y contentas. No lloraban, en su cara estaban sus sonrisas que eran de mucha felicidad.
Yo también me sentí muy feliz abrazando a la gente. Creo que los abrazos ayudan a las personas, porque así damos y recibimos mucho amor. Y por eso me gustaría volver a hacer esto de regalar abrazos junto con mi familia porque hace que las personas se sientan muy felices y yo también me sentí acompañado haciéndolo.
Quiero mandar este mensaje a los niños y las niñas de todos lados y también a la gente grande y a los ancianos; que no se sientan solos. ¡Nosotros estamos con ustedes! Todo lo que les pase nos lo pueden contar y podemos juntos ayudar a los demás.
¡Hacer cosas bonitas es muy bueno para toda la gente que vive aquí en La Cantera!
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